En la visita fuimos conscientes
de todo lo que ocurre en el espacio que nos rodea, e incluso disfrutar de un
viaje un poco turbulento por nuestro universo.
Al llegar, pudimos observar la
gran cúpula que representaba a nuestro planeta, e incluso la luna.
Nos mostraron dos prototipos más
“primitivos” y sencillos de crear nuestros propios cohetes a base de botellas
de plástico, cartulina y agua. Uno de ellos era tan solo propulsado por aire a
presión y otro con agua y aire a presión. Todos creímos que el primero llegaría
más alto, pero para nuestro asombro, fue todo lo contrario.
Continuamos la visita pudiendo
observar de diferentes maneras el Sol, a través de grandes telescopios,
especializados en su visión y en su estudio. Aunque era complicado diferenciar
y apreciar su actividad, conseguimos presenciar algunas de las manchas y de las
tormentas que se estaban produciendo.
A continuación, uno de los guías
nos explicó e informó de las diferentes características y curiosidades que
podíamos encontrar en nuestro Sistema Solar, y además dentro de la cúpula de la
Tierra, vimos un documental sobre esto muy interesante.
Por último, pudimos ponernos en
el papel de un astronauta y de su viaje en cohete por nuestro universo, aunque
con ciertas dificultades.
Fue una mañana muy divertida y
curiosa de la cual sacamos muchas curiosidades de todo lo que nos rodea y que
para la mayoría de nosotros era desconocido.
Belén Izquierdo Guerrero, 1º Bach. A
